ENAMORAMIENTO

Desdichadamente a nivel social existen falsas creencias en relación al fenómeno del enamoramiento, y se ignora muchas de sus características. Así el enamoramiento por ser un vínculo de base bioquímico se puede dar entre personas sumamente disímiles, por ejemplo, de diferente clase social, ideológica, económica y religiosa.

Curiosamente y casi por regla general, el individuo no se enamora de la persona que le gusta, sino mas bien al contrario, le gusta la persona de la que se enamora, si para un individuo su preferencia son las mujeres morenas, no es de extrañar que se enamore de una rubia, es decir las características físicas juegan un papel secundario.

De igual manera, si racionalmente un individuo prefiere las personas intelectuales, ese parecer de poco influirá al momento que cupido lo fleche; el amor es química y no preferencias prefabricadas por nuestra cosmovisión. Por eso no es farsante aquella artista que dijo: "me gustan los hombres inteligentes y humildes" y se casó con alguien que al parecer dista de ser brillante y discreto, no, estas son las grandes sorpresas que nos da el amor, porque como decía Pascal, "el corazón tiene razones que la razón desconoce".

El enamoramiento en su evolución natural dura alrededor de uno a dos años, periodo en el cual, el individuo enamorado idealiza a su pareja y la percibe como ideal, cordial, atenta, bella, no porque lo sea, sino porque así la vemos, por ese fenómeno estrictamente bioquímico. Conforme trascurren esos dos primeros años, el fenómeno se atenúa, hasta que el individuo logra percibir a su pareja con defectos y virtudes, y es ahí donde puede empezar el amor, ese es el momento clave, que define la permanencia o separación de ese vínculo incipiente.