Artículos de la Semana 1964 0 Caras de una misma moneda INFARTO E IMPOTENCIAINFARTO Por Dr. Mauro IEn Costa Rica nos estamos acostumbrando a presenciar cómo nuestros seres queridos enfrentan enfermedades tan serias y graves como infartos, derrames cerebrales, cáncer y diabetes. También es muy común escuchar que tal o cual amigo tienen el colesterol, los triglicéridos o cualquiera de las grasas que circulan por el cuerpo con altos niveles.Las estadísticas nacionales son claras en demostrar la gravedad del problema. Las enfermedades del corazón, junto con el cáncer, representan la primera causa de muerte nivel nacional, solo superada a veces por la alarmante e irresponsable cifra de muertes que provocan los accidentes de tránsito. Todo este panorama visto de manera somera nos deja la impresión que no guarda relación con los problemas sexuales. Sin embargo, las más recientes investigaciones sugieren que los problemas de erección suelen ser provocados por las mismas causas por las que se producen los infartos y el mismo cáncer. Es decir, que la impotencia, así como las enfermedades cardiovasculares, tienen en muchos casos un común denominador las dietas ricas en grasa, el sobre peso y la falta de ejercicio. Claro está, la relación no es siempre directa. Frecuentemente median enfermedades como la presión alta y la diabetes, que adicionalmente dañan la circulación y provocan fuertes disminuciones en la sangre que llega a los diferentes órganos. Y eso es precisamente la causa de la mayoría de los cuadros de impotencia. Las arterias que llegan al pene están tan dañadas, que impiden que se llene de sangre y por ende impiden la erección. El daño que provocan estas enfermedades ataca a todos las arterias del cuerpo. Por eso, cuando se presentan fallas en la erección es probable que también existan daños en las arterias que llegan al corazón y al cerebro. Los estudios actuales sugieren que la presencia de problemas de erección es indicativa de que en un futuro se pueden presentar cuadros tan graves como el infarto y el derrame cerebral. La ciencia es clara en señalarnos que somos un todo, que cada uno de nuestros órganos se encuentra interrelacionado con los demás, que el corazón, el cerebro, la sangre, así como el resto del organismo están presentes como protagonistas de la respuesta sexual. La ciencia es clara en señalarnos que si queremos mantenernos sexualmente competentes con el paso de los años, tenemos que cuidar el cuerpo, no una parte del cuerpo sino todo el cuerpo, porque la sexualidad es el resumen del funcionamiento corporal integralmente. La ciencia es clara en señalarnos que el pene y los testículos forman parte de un enorme equipo de órganos que funcionan coordinadamente y que la falla y deterioro de alguno, tendrá repercusiones en el funcionamiento del resto. Ante este panorama, se entiende la importancia de medir periódicamente los niveles de azúcar, colesterol y de los triglicéridos así como el registro de la presión arterial. Ante la presencia de fallas en el desempeño sexual, se debe acudir a la consulta médica. Esta es la razón de nuestra reiterada invitación que semanalmente hacemos a nuestros lectores para que asuman nuevos estilos de vida, en donde el ejercicio, las dietas ricas en frutas, verduras, legumbres y agua sean parte de la realidad cotidiana.
