Artículos de la Semana 1277 0 ME SIENTO INFIEL EN EL GYM Por Dr. Mauro MSoy una mujer casada de 48 años. Mi esposo y yo somos muy espirituales y cumplimos con las normas religiosas. En los últimos años me engordé y el doctor me mandó a hacer ejercicio y me metí en un gimnasio. Para mi sorpresa, comencé a sentir que me estimulo sexualmente cuando veo tantos hombres deportistas. Todos son muy respetuosos pero me siento mal porque pienso que soy infiel y no quiero seguir yendo al gimnasio.En nuestra sociedad todavía perdura el legado oscurantista de la edad media en el que se creía que en el amor verdadero no había ojos para otras personas. Se consideraba que ver a alguien atractivo era un signo ostentoso de desamor y a la vez de una falta de lealtad hacia la pareja. Curiosamente esto era particularmente cierto con las mujeres no así con los hombres. Hoy la ciencia es clara en señalar que las parejas genuinas que se profesan un amor auténtico y real encuentran atractivas a muchas personas en el cada día, sin que esto signifique que sus sentimientos están en entredicho. Recordemos que hoy playas, gimnasios, y balnearios son ambientes en los cuales se usan vestimentas minúsculas, ideada para resaltar los atributos corporales de una manera deliberadamente sexis, así que es entendible y normal que nos resulte sexualmente estimulante y hasta excitante muchas de esas esbeltas figuras. Muchas personas se sienten mal consigo mismas ante esta situación y hasta experimentan sentimientos de culpa, que puede generar cierto desconcierto personal, al punto que algunos se alejan de estos sitios. Por eso, debemos ser claros que es una reacción natural que no debe ser mal entendida ni generar alarmas.
