ADOPCION SINGULAR

En primera instancia hay que recordar que históricamente los hijos solo podían ser criados por parejas estables conformadas por hombre y mujer. Esto respondía a la situación económico laboral que imperó en nuestra sociedad hasta hace muy poco tiempo. En esa época no existía un mercado laboral remunerado para la mujer, es decir la mujer tenía pocas posibilidades de trabajar dignamente fuera de su hogar, de manera que no se permitía la adopción por parte de una mujer soltera, porque se daba por un hecho de que no podría sufragar los gastos económicos de la crianza.

De igual manera con los varones, la vida era tan dura que, un hombre trabajaba de sol a sol y apenas podía llenar sus necesidades básicas y la de su familia, pero le resultaba imposible lidiar con las faenas del hogar. Bajo esa premisa, no se permitió la adopción por parte de un varón "soltero", porque se daba por un hecho que no podría responder a las necesidades de apego y esmero que exige la buena crianza de un hijo.

Con los cambios económicos y sociales que ha vivido nuestra sociedad occidental, hoy las mujeres tienen grandes posibilidades de conseguir un trabajo bien remunerado y asumir su vida personal lejos de la dependencia masculina. De igual manera, los varones hoy cuentan con trabajos que les permiten buenos ingresos y a la vez tener el tiempo suficiente para asumir el rol de padres. Por eso, desde hace ya unos años se comienza a cuestionar las viejas normas, y a ver como viable la adopción de un hijo por parte de una persona soltera.

Sin embargo, surgió la duda, será un hombre capaz de suplir el afecto de una madre, será una madre capaz de suplir el afecto que puede dar una pareja. ¿Como será la infancia de un niño que solo tenga padre?, de igual manera, ¿como será la infancia de un niño que solo tenga madre?

Hoy sabemos que lo ideal no es que un niño crezca en el seno de una pareja, no, hoy sabemos que lo ideal no es que un niño tenga papá y mamá, no, hoy sabemos que lo ideal es que un niño no solo tenga y crezca al lado de un padre y una madre sino que estos padres cumplan a cabalidad con sus funciones.

Son muchos los niños infelices que provienen de hogares tradicionales, son muchos los niños victimas del síndrome del niño agredido, que crecieron y que fueron lastimados tanto por el padre como por la madre. Hoy ya entendemos que lo que un niño necesita es amor, pero amor del bueno, amor mayor, amor mayúsculo, amor con responsabilidad y no simplemente un papá y una mamá.

Por eso una mujer trabajadora y responsable que este dispuesta a asumir de una manera abnegada su rol de mamá científicamente esta comprobado que puede criar a su hijo de la manera adecuada. Un hombre conciente que este dispuesto a asumir un verdadero rol de padre puede llevar a su hijo a buen puerto.

Por otra parte, muchos cuestionaban la adopción en si misma, si era igual el vinculo cuando el hijo es de sangre que cuando el nexo es solo emocional. Hoy de eso ya no hay duda, la sangre es poco importante en los seres humanos, en la educación y formación de un niño el factor biológico no es una variable a tomar en cuenta. Lo que importa es el afecto, el esmero, el desvelo, la preocupación. Lo que importa es la fuerza del cariño. Lo realmente importante es que el padre entienda que siempre tiene que estar al lado del infante, con su mano pronta a proteger. Resumía De Bravo el rol de un verdadero padre cuando decía: "Hijos para saber lo que es el miedo"