Temas Difíciles 2617 0 Una explosión de placer para ellas. EL ORGASMO: ESE PROTAGONISTA Por Dr. Mauro EEn la década de los sesenta, la ciencia se dio cuenta de que la mujer contaba con un enorme potencial orgásmico que supera con creces al potencial masculino. Desde entonces, se ha estudiado a fondo y cada día nos sorprende más a los especialistas.Recordemos que el orgasmo femenino puede durar desde unos cuantos segundos hasta minutos, y en el tanto se cuente con la estimulación adecuada la sensación orgásmica se puede prolongar de manera indefinida. Inicialmente, las sensaciones se originan en los órganos genitales, pero rápidamente se generalizan a todo el cuerpo produciendo una sensación placentera corporalmente completa. Es difícil describir qué se siente en un orgasmo. Las descripciones vivenciales lo asemejan a una “explosión de placer”, “un juego de pólvora”, “una estampida de sensaciones”, “un cosquilleo placentero”, “un sabroso calambre”, en fin, los relatos vivenciales son hermosos símiles que solo pueden ser entendidos por aquellas mujeres que han experimentado tal placer. Desde una perspectiva más racional, podríamos decir que el orgasmo produce una sensación de placer desmedido que se acompaña de la contracción sostenida de todos los músculos del cuerpo y que a nivel mental aflora la idea: “que no se termine”. El orgasmo demanda de una enorme cantidad de energía y despliegue físico y entre más dure el tiempo orgásmico, mayor será el deleite y la magnitud de la reacción corporal. La forma en que la mujer reacciona ante el orgasmo varía considerablemente de una mujer a otra. Así, algunas mujeres experimentan el orgasmo de manera silente, concentradas en las potentes sensaciones que emergen del cuerpo, sin dar muestras físicas o faciales evidentes. En otras, el patrón respiratorio cambia de manera radical, el jadeo, los suspiros y la respiración apresurada son notorias tanto para la pareja como para la misma mujer. También el orgasmo se puede expresar de manera intensa, con gritos, gemidos y movimientos bruscos. Es frecuente que una misma mujer experimente el clímax orgásmico de diferentes formas, acorde a la situación, al tipo de estímulo o en relación al estado de ánimo imperante. El orgasmo es el protagonista de la intimidad, y es uno de los factores más importantes en la génesis de las ansias y el deseo. De tal forma que la mujer que no logra alcanzar el orgasmo con el tiempo va perdiendo la iniciativa sexual, el deseo se va apagando al punto que la sexualidad deja de resultar atractiva y deseable. Son estas las mujeres que con una sinceridad dolorosa confiesan que podrían vivir sin sexo, sin intimidad, sin relaciones sexuales y que muchos de sus encuentros sexuales son motivados más por complacer a la pareja que por su propia iniciativa.A los “hombres de antes” eso no les importaba, partían del falso supuesto que “de por sí las mujeres son frías”, pero el hombre de hoy es diferente, desea el goce compartido, se place en ver a su pareja deleitándose de placer, y poca gracia le hace una relación en la que solo él disfruta.La gran ventaja de nuestros tiempos es que hoy contamos con tratamientos que permiten que la mayoría de esas mujeres puedan alcanzar el orgasmo y el deleite en pareja.