Temas Difíciles 2855 0 EL APAGÓN SEXUAL CUANDO NOS QUEDAMOS SIN ENERGÍA SEXUAL La anulación de la sexualidad Por Dr. Mauro CLa sexualidad fluye de manera espontánea y placentera, y crea una seguidilla de sensaciones que se prolonga a lo largo del tiempo y genera un enorme bienestar. Ese es el secreto que encierra el sexo: es un placer en sí mismo. En algunos momentos en el ciclo de vida, tanto de hombres como de mujeres, estando previamente bien se presenta un deterioro marcado y casi absoluto en el plano sexual: una pérdida en el deseo, una falla en el desempeño, una apatía hacia la sexualidad, hasta el mismo rechazo de la experiencia erótica, muchas veces acompañado de un distanciamiento en el plano sentimental. La forma tan aparatosa de presentarse este declive sexual ha hecho que muchos se refieran a este fenómeno como “el apagón sexual”, haciendo referencia a los apagones que suceden cuando hay un corte en el fluido eléctrico. Esta pintoresca comparación describe muy bien la intensidad del bajonazo sexual: es algo así como estar sin energía sexual, es como quedar en una oscuridad sexual.Curiosamente, a pesar del súbito desinterés sexual, la mayoría de los pacientes no se percatan de ello hasta pasado cierto tiempo. Al inicio lo consideran circunstancial y lo atribuyen al estrés cotidiano, al cansancio o a lo apretado de la agenda semanal. Cuando pasa el tiempo, se dan cuenta de que el sexo rara vez aparece en el marco de la conciencia. A veces con tono de reproche, otras veces con cierta preocupación, se preguntan: ¿qué pasó conmigo?, ¿cómo pasé de ser una persona sexualmente proactiva a un individuo sin iniciativa sexual?Desde luego, con más frecuencia es la pareja quien “pega el grito al cielo”, pues sus reiterados intentos por mantener encuentros íntimos suelen ser negados de manera indirecta con las clásicas excusas sexuales: “estoy cansado”, “es muy tarde”, “me duele la cabeza. Sin embargo, llega el momento en que las excusas no justifican tantas negativas, y esto provoca que ambos se cuestionen la esfera sexual.Hoy la ciencia ha documentado algunas etapas en la vida donde es más frecuente este decaimiento sexual. Así, el embarazo, la lactancia y la menopausia pueden producir cambios hormonales que ocasionan la abolición de la sexualidad.De igual modo, las drogas y el licor, aunque pueden generar un bienestar transitorio, al cabo de un tiempo les cobra a muchos la factura, tanto en materia de salud como en el área sexual. Muchos de ellos aquejan un desinterés sexual desmedido. También, es claro que los problemas maritales, vivenciales y económicos pueden desencadenar esta anulación sexual.No obstante, en la mayoría de los casos ni el paciente ni la pareja encuentra una razón evidente para este desinterés. La vida sigue igual, el trabajo marcha bien, la esfera familiar cursa sin exabruptos, no se consumen drogas y el único punto en entredicho reside en la cama. En estos casos, muy probablemente se trate de una alteración hormonal o metabólica que está bloqueando la respuesta sexual. Por fortuna, hoy la ciencia posibilita encontrar la causa de este decaimiento sexual y restaurar con diversos tratamientos la vida sexual florida. En este sentido, la recomendación es consultar cuanto antes, apenas notamos esbozos de que se avecina uno de estos apagones.