Trivia Sexual 1637 0 PROBLEMAS CON LA CIGÜEÑA DESPUÉS DEL PARTO, HACE DOS AÑOS, NO CONSIGO EL ORGASMO Anorgasmia post gestacional Por Dr. Mauro DEl embarazo sin lugar a dudas es una etapa maravillosa, tanto que poetas y religiosos se refieren a él como el milagro más grande del mundo, y nos es para menos en esos nueve meses reside el secreto de la sobrevivencia de la especie. Aun cuando es un fenómeno natural y sumamente conocido por las parejas y la colectividad, desde el punto de vista científico es un verdadero enigma que encierra un sinnúmero de mecanismos muy complejos que la ciencia no ha podido dilucidar a cabalidad.Es claro que durante estos tres trimestres la vida la embarazada experimenta una serie abrupta e intensa de modificaciones corporales que transforman de manera significativa la producción de hormonas, el metabolismo femenino y el funcionamiento corporal desde el área cerebral hasta la zona genital.Estos cambios hormonales y metabólicos tienden con frecuencia a generar múltiples y variados efectos sobre el desempeño sexual. Curiosamente las repercusiones sexuales varían de manera considerable de una mujer a otra y aun en la misma mujer en las distintas etapas del embarazo. Así algunas describen un incremente significativo en el desempeño sexual que incluye tanto en el deseo sexual como en la capacidad para conseguir orgasmos. Otras de manera sorprendente relatan que la vida sexual sigue igual y que no tuvieron cambios significativos. Un porcentaje considerable relata que la vida sexual se apaga ya sea porque se pierde el deseo, porque la penetración se vuelve molesta o porque se hace difícil experimentar el orgasmo.Sea cual sea el panorama, después del parto la mayoría de las mujeres recupera su estado sexual previo. El problema surge cuando los efectos negativos persisten más allá del parto y del periodo de lactancia. Al inicio las parejas tienden a creer que es cuestión de dar tiempo para que la situación cambie o relacionan el mal desempeño sexual con el esfuerzo y cansancio que condiciona cuidar al niño en brazos. Desdichadamente en la mayoría de las mujeres el problema sexual no cede espontáneamente y ese compás de espera se va alargando y atenta con comprometer la estabilidad de la pareja. No es raro que el varón interprete esta negativa sexual como un signo de desamor, como una señal de que la relación ya no es la misma, que la pasión se perdió o peor aún que se murió el amor. Por otra parte es frecuente que la mujer acceda a tener relaciones por el amor y el cariño que le profesa a su pareja aun cuando no experimente el deleite sexual y hasta aborrezca los encuentros íntimos. Bajo estas condiciones la vida sexual y la vida de pareja se vuelven tormentosas, difíciles y muchas veces degenera en infidelidades y separaciones. Afortunadamente la ciencia ha descubierto que muchos de estos problemas sexuales son producto de alteraciones metabólicas, hormonales o vivenciales para los cuales hoy contamos con diversos tratamientos que son muy efectivos y que nos permiten devolver a esas parejas la sexualidad perdida. Claro está el secreto reside en consultar cuanto antes para evitar que el vínculo de pareja se vea afectado.